La transformación digital es la integración de la tecnología digital en cada área del negocio, que genera cambios fundamentales en la forma en que una empresa opera y entrega sus productos o servicios a los clientes aprovechando los avances tecnológicos.
En el caso de las instituciones educativas, la adopción digital puede ayudar a las escuelas a que sean más competitivas. A raíz de la pandemia, las personas se han dado cuenta del gran alcance de la tecnología en las prácticas educativas. Dado que el mundo digital requiere que los educadores encuentren nuevas formas de incorporar e integrar la tecnología en las prácticas docentes, las escuelas que lo gestionen mejor se destacarán naturalmente por encima de las demás.
1. La gente está acostumbrada al status quo
Educar a las personas sobre la transformación digital, enseñarles las habilidades necesarias en partes fácilmente digeribles y ayudarlos a comprender los beneficios para ellos y sus estudiantes al completar esta transformación sigue siendo la clave para ganar su aceptación.
2. Falta de una estrategia o dirección clara para la adopción digital
Una transformación de este tamaño puede resultar intimidante para muchos dentro de la institución. Sin embargo, llevar adelante a los educadores y administradores tendrá el mayor éxito cuando una estrategia sólida pueda dejar en claro lo que la escuela quiere lograr y los puntos y pasos principales en los que se enfocarán para lograr este objetivo.
3. Conocimiento incompleto de las habilidades necesarias para lograr una adopción digital significativa
La brecha de habilidades sigue siendo una consideración importante cuando se trata de transformar con éxito las instituciones educativas. Por lo tanto, las escuelas deben encontrar formas de incorporar oportunidades clave de aprendizaje en su plan de transformación digital. Incluir talleres y seminarios que capaciten a los educadores y administradores para aprovechar todo el potencial de la educación jugará un papel vital.
4. La capacidad de los sistemas existentes
Dado que la tecnología ya comenzó a infiltrarse en el mundo de la educación durante las últimas dos décadas, muchas instituciones educativas ya tenían una variedad de herramientas y sistemas diferentes que usaban para emplear algunas formas limitadas de tecnología. Desafortunadamente, dado que estos sistemas no se usaron como un sistema integrado, muchos de los sistemas no funcionan bien entre sí, lo que crea un sistema que no coincide en toda la institución.
Por lo tanto, las escuelas por lo general deben encontrar el mejor camino hacia la actualización o la adaptación de sus sistemas actuales para mejorar su compatibilidad y hacer posible que el sistema funcione en conjunto.
Artículo escrito por Eric Debétaz para EHL Insights